Letra sin acordes
A la huella, huellita,
Dios, ayúdame.
A la huella, huellita,
¡Dios, ayúdame!
En un lecho seco construí mi hogar;
no temí que el río volviera a llegar.
Mas el sol de octubre, la nieve ablandó;
y de las montañas el río bajó.
¿Qué fue de mi casa?
Nada al fin quedó
¿Qué fue de mi vida?
Esta no murió;
el río del pecado,
Cristo al fin venció.
Él es roca fuerte:
¡Yo no he de temer!
A la huella, huellita,
Dios, ayúdame.
A la huella, huellita,
¡Dios, ayúdame!
En un lecho seco
del mundo crecí;
del pecado el río
al fin conocí;
la corriente aquella,
lograba vencer.
En cruel desespero
me vi perecer.
¿Qué fue de mi casa?
Nada al fin quedó
¿Qué fue de mi vida?
Esta no murió;
el río del pecado,
Cristo al fin venció.
Él es roca fuerte:
¡Yo no he de temer!
A la huella, huellita,
Dios, ayúdame.
A la huella, huellita,
¡Dios, ayúdame!
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